RESUMEN
Una de las características de las prácticas de evaluación en la educación inicial es la inexistencia de calificaciones numéricas. Sin embargo, la evaluación en el nivel inicial no está exenta de tensiones y paradojas. En base a una consulta abierta a docentes, el artículo ofrece una reflexión sobre la evaluación en ese nivel y sobre los informes individuales en los que se suelen comunicar los resultados de la evaluación. En este punto, se observa el contraste entre dos modelos: el del informe taxonómico, y otro, menos frecuente, que relata de manera más abierta las experiencias de la vida escolar.
Palabras clave Educación inicial; Primera infancia; Prácticas de evaluación