El análisis del personaje ficticio Dexter permite la construcción de hipótesis metapsicológicas sobre los orígenes de la perversión. La posición perversa en este caso se debe a la presencia masiva de la violencia en los orígenes del sujeto psíquico. Dexter expresa el abandono sufrido a través de una actuación pulsional, los asesinatos en serie, intentando invertir el estado de pasividad en el que se encuentra. Su angustia puede ser organizada de dos maneras distintas: la primera es consciente, proporcionada por su padre, Harry, quien le enseña a no dejar rastros de sus crímenes. La segunda es inconsciente, y traduce el deseo de someter al otro al dolor, haciendo con que, a través del mecanismo de la identificación proyectiva, el perverso disfrute del sufrimiento que provoca, siendo remitido, así, a sus experiencias originarias de sumisión. Concluimos que, en la perversión, la angustia no sólo está presente, sino que es constitutiva de la elección del sujeto de operar por medio de la violencia.
Perversión; angustia; violencia