Resumen
Esta investigación pretende demostrar cómo de las alianzas entre la psiquiatría y las neurociencias emerge una realidad social en la que el diagnóstico psiquiátrico está extremadamente difundido, abarcando un número creciente de personas y situaciones. Por tanto, cuestiona cómo la reformulación del poder psiquiátrico, a partir de la explicación cerebralista de los trastornos mentales, ayuda a la ampliación de los procesos cotidianos de psicopatologización. La hipótesis es que el propio saber-poder médico-psiquiátrico viene contribuyendo a su amplificación, confirmándose como una de las prácticas más sensibles hoy en día en términos biopolíticos. En este sentido, aplicando la técnica de investigación de la documentación indirecta y el método deductivo, se realizó una revisión bibliográfica crítica e interdisciplinaria. Una vez contrastada la hipótesis principal, concluye, finalmente, que la patologización generalista del sufrimiento psíquico corresponde a un nuevo reduccionismo biológico, que crea un nuevo modelo de control social, ahora basado en la denominada neuropsiquiatría.
Palabras clave
Neurociencias; Subjetividad; Psiquiatría; Control; DSM