JUSTIFICATIVA Y OBJETIVOS: La historia, al contrario de lo que muchos se imaginan, no es algo limitado al pasado y de carácter inmutable. Ella también sufre adaptaciones de acuerdo con las conveniencias de una u otra clase social dominante. Informaciones que fueron ocultas, deliberadamente o no, una vez descubiertas, podrán cambiar conceptos actuales, hasta entonces establecidos como verdaderos. Siendo así, la historia, como cualquier otra ciencia, no es totalmente imparcial; sufre influencias e interferencias de fuerzas de naturaleza política, religiosa, económica y cultural. También con la Historia de la anestesia no es diferente. Algunas cuestiones permanecen intrigantes: ¿Por que pasó tanto tiempo para que la civilización pudiera controlar el dolor? ¿Quién realmente descubrió la Anestesia? ¿Cómo era el mundo cuando ocurrió el descubrimiento oficial de la Anestesia? Para reflexionar a respecto de tales preguntas es necesario recurrir a la Historia de la Anestesia. CONTENIDO: El texto se refiere al acto quirúrgico, al dolor y a la anestesia desde la cultura helénica hasta la primera anestesia oficialmente reconocida, destacando nombres frecuentemente olvidados y las peculiaridades históricas que beneficiaron o perjudicaron este o aquel descubridor. También enfoca los valores, la cultura y el desarrollo científico en el siglo XIX, correlacionándolos con los eventos que marcaron el adviento de la anestesia. CONCLUSIONES: No seria justo atribuir el mérito del descubrimiento de la anestesia a una única persona. Las peculiaridades históricas que beneficiaron o perjudicaron este o aquel pesquisador no pueden ser olvidadas. Morton fue, sin duda, el más favorecido por las circunstancias. Vivió en el tiempo y local privilegiados, y convivió con las personas más apropiadas a su intento. Todavía, una cuestión persiste. ¿Al final, quién es más importante: el padre de la idea o aquel que la divulgó? La respuesta ciertamente caerá en el campo de la subjetividad.