INTRODUCCIÓN:
Los portadores de Mal de Chagas frecuentemente presentan la hipertensión arterial sistémica (HAS) como la principal comorbidez. En individuos hipertensos con y sin Mal de Chagas el control de HAS generalmente es medicamentoso. Las medidas alternativas de intervención como el ejercicio físico aeróbico han sido preconizadas como la manera más efectiva para reducir los niveles de presión arterial.
OBJETIVO:
Evaluar la influencia del ejercicio físico sobre la presión arterial de mujeres hipertensas con y sin Mal de Chagas.
MÉTODOS:
Diecinueve voluntarias divididas en los grupos G1 (nueve con Mal de Chagas) y G2 (diez sin Mal de Chagas) fueron sometidas a un programa de entrenamiento de 12 semanas, con duración de 30 a 60 minutos dos veces por semana. La presión arterial sistólica (PAS), diastólica (PAD) y la frecuencia cardíaca (FC) fueron evaluadas en el pre y post esfuerzo al inicio (T0), después de seis (T6) y 12 (T12) semanas.
RESULTADOS:
En T6, mejora significativa fue observada en la PAS pre y post esfuerzo y en la PAD post esfuerzo, para ambos grupos. En el T12, G1 presentó mejora significativa para todas las variables, excepto FC post esfuerzo y G2 para PAS pre y post esfuerzo y FC post esfuerzo. No hubo diferencia significativa entre G1 y G2 para las variables estudiadas.
CONCLUSIÓN:
El ejercicio físico aeróbico de baja intensidad reduce significativamente la presión arterial de mujeres con Mal de Chagas, puede ser realizado con seguridad e coloca a los pacientes con esta enfermedad en la práctica rutinaria de ejercicios.
hipertensión arterial; mal de Chagas; ejercicio físico; género femenino
