FUNDAMENTOS Y OBJETIVO: Pocos estudios longitudinales han sido realizados en mujeres físicamente activas para determinar el impacto del envejecimiento de la aptitud física y la capacidad funcional. El objetivo de este estudio fué comparar la evolución del perfil neuromotor y la capacidad funcional de mujeres activas en el período de un año de acuerdo con la edad cronológica. MÉTODOS: La muestra estuvo compuesta por 117 mujeres de 50 a 79 años de edad (<img border=0 width=10 height=13 id="_x0000_i1028" src="../../../img/revistas/rbme/v9n6/18935x01.gif" align=absmiddle>: 65 ± 6,6 años) participantes de un programa de ejercicios aeróbicos, dos veces por semana, 50 minutos por sesión durante 5,4 ± 3,0 años y divididas por la edad: 50-59 (n: 23); 60-69 (n: 60); 70-79 (n: 34). Los tests neuromotores y de movilidad incluyeron: fuerza muscular de los miembros inferiores y superiores, agilidad, flexibilidad de tronco, velocidad de levantarse de la silla, equilíbrio estático, velocidad normal de andar y velocidad máxima de andar. Los resultados iniciales de las dos evaluaciones siguientes, realizadas intérvalos de 6 meses, fueron comparados usando ANOVA two way, con post-hoc Bonferroni. RESULTADOS: En un ano no hubo ninguna alteración del desempeño neuromotor, ya que la velocidad de levantar de la silla y la velocidad de andar no evidenciaron diferencias significativas en los grupos de 50-59 e 60-69 años, presentando resultados un 10-20% mejores; en cuanto a la velocidad máxima de andar hubo una mejora (8%) en los grupos de 60 a 79 años. CONCLUSIÓN: La evolución de la aptitud física y la capacidad funcional tuvo un comportamiento similar, en mujeres físicamente activas independientemente de la edad cronológica. Esta evolución fortalece la hipótesis de un efecto favorable de la actividad física regular en la promoción de la salud, estrategia fundamental del envejecimiento saludable.
Envejecimiento; Variables neuromotoras; Actividad física; Capacidad funcional; Estudio longitudinal
