Número, composición y distribución de la fuerza de trabajo de enfermería en Brasil: una fotografía^*

Resumen

Objetivo:

analizar la disponibilidad (en términos de número y composición) y accesibilidad (en términos de distribución geográfica) de la fuerza de trabajo de enfermería en Brasil.

Método:

estudio descriptivo y transversal, con recolección retrospectiva de datos, identificados a través de una combinación de bases de datos disponibles en sitios web institucionales y estructurados en función de los indicadores de las “Cuentas Nacionales del Personal de Salud” de la Organización Mundial de la Salud. La población del estudio fueron profesionales de enfermería de nivel superior (enfermeros) y nivel medio (auxiliares y técnicos en enfermería). Se incluyeron indicadores de número, composición, distribución (por franja etaria y sexo) y razón entre enfermeros y médicos.

Resultados:

aumentó el número de personal entre 2005 y 2010, principalmente la de nivel medio y técnico. La mayoría del personal tiene entre 36 y 55 años y predomina el sexo femenino en todas las categorías, pese a que aumentó la cantidad de trabajadores do sexo masculino. Se observó que la distribución de personal en las diferentes regiones de Brasil era desigual y la región Sudeste es la que tiene la mayor cantidad de profesionales. La proporción de enfermeros por médico es inferior a uno en las regiones Sur y Sudeste.

Conclusión:

a pesar de que la cantidad de enfermeros es elevada, la distribución es desigual. El aumento de la cantidad de técnicos en enfermería superó significativamente al de enfermeros, lo que indica que las políticas de formación técnica son más intensivas que las observadas en la educación superior.

Descriptores:
Recursos Humanos en Salud; Enfermería; Organización y Administración; Políticas, Planificación y Administración en Salud; Brasil; Política Pública

Destacados:

(1) La distribución de la fuerza de trabajo de enfermería en Brasil es desigual.

(2) Hay una diferencia en la composición del equipo de enfermería.

(3) Hay que planificar la fuerza de trabajo para garantizar el cuidado de la población.