La Estrategia de Salud de la Familia propone a partir de la comunidad, una reestructuración de la atención primaria asistida en su contexto. En ese sentido, la participación social es imprescindible en el diagnóstico, la definición de prioridades, el acompañamiento y la evaluación del trabajo. El trabajador de la Salud tiene un papel fundamental para crear ambientes y condiciones favorables a la participación. Los objetivos de este estudio fueron: describir las concepciones/prácticas de participación de un equipo de Salud de la Familia e implementar un proceso de reflexión acerca de estas cuestiones, utilizando la metodología problematizadora. Para ello, fueron realizados seis encuentros, los cuales fueron grabados, transcritos y analizados en su contenido. Se constató que las concepciones y las prácticas del equipo son influenciadas por la visión medicalizante, factor que consideramos limitante en el avance de la participación. La metodología problematizadora permitió identificar con el equipo, la importancia, los límites y las posibilidades de la práctica de participación junto al usuario, lo que puede contribuir al aumento de la conciencia acerca de su papel mediador.
Promoción de la salud; Participación comunitaria; Salud de la familia